Una vez más la universidad atenta contra la libre expresión
Indignación, enojo, ira,
vergüenza, tristeza, pero a la ves esperanza, convencimiento y fuerza, despierta
en nosotros cada vez que observamos como la gestión de nuestra Alma Mater solo
apunta a irrespetar las libertades y pretende borrar la memoria histórica del
estudiantado...
Una vez más esta administración ha
atentado contra la libertad de expresión, la resistencia al olvido, contra la
identidad con nuestra Universidad, en contra de la lógica de lo público, de lo
nuestro, del único patrimonio del desposeído, además de una evidente agresión a
las escasas construcciones democráticas que se nos ha permitido realizar.
Las razones son simples cuando se
les pregunta ¿porque hacen esto?, su respuesta es: que en el campus no puede
haber contaminación visual y que cada vez que borran estos murales, afiches,
carteleras, pendones, etc. que los estudiantes colgamos o hacemos, están
limpiando la universidad, aparentemente el resultado de nuestras formas de
expresión son basura o “cosas” que hay que borrar o sacar, la contaminación
visual se convirtió en su piedra filosofal para eliminar lo que les fastidia.
En este caso creo que podemos
preguntarnos ¿los trabajadores que quitaron los murales -y la administración
que les ordena hacerlo-, no conocen lo que representan? ¿No son conscientes de
lo que nos están quitando a los estudiantes? No se sabe que tanto sepan estas personas
sobre la historia y actualidad de nuestro país, parece que no deben saber mucho
o que es mejor invisibilizarlo. Esto lo digo porque entre las carteleras,
pendones y murales que borraron se encontraban los mensajes, personajes, e
imágenes de nuestro pasado y presente, como por ejemplo, la imagen de Jaime
Pardo Leal dirigente de la UP, partido político que fue masacrado por las
fuerzas paraestatales que aún son actores en la realidad nacional y en estos
momentos se oponen a la paz; la imagen de CHE popular guerrillero y figura del
anti-imperialismo; el nombre de Carlos E. Bravo estudiante asesinado a causa de
sus ideas; un mural sobre la conmemoración de la masacre en la casa de la JUCO,
reconocido caso de impunidad en nuestro país; los murales de arte que presentaban
el sentido crítico de los estudiantes; entre otras expresiones más que
simplemente la administración mandó a eliminar.
Consideramos pertinente denunciar
públicamente los actos cometidos por parte de la administración de la Universidad
al quitar una serie de carteles en que convocábamos a reuniones y foros con la
finalidad de organizar y estructurar el trabajo estudiantil, tales actos
ocurrieron el lunes 8 de abril
del presente año, esta es muestra fehaciente que no solo la libertad de
expresión está siendo censurada, sino también la libertad de organización, de crear
espacios donde todos podamos luchar por una mejor universidad, una universidad
critica, creadora y transformadora.
Cuando la Constitución Política
de Colombia –como máximo rector nacional- nos señala que tenemos derecho a la libertad
de conciencia, culto, expresión, difundir y enseñanza de lo que pensamos (Art
13, 20, etc.), al igual que la Declaración Universal de los Derechos Humanos (Art
19), resulta apenas natural preguntarnos: ¿La Universidad Nacional de Colombia sede
Medellín respeta la Constitución? ¿Respeta la Declaración Universal de los
Derechos Humanos? Contestarlo no es necesario, los hechos hablan por sí mismo,
parece que la UN sigue los mismos lineamientos de infringir y violar los acuerdos, tratados, etc,
pactados por este, resulta normal ¿no cree?
¿Será que la universidad como el gobierno no busca algo mejor para su
constituyente primario?
Compañeros es preocupante el
actual estado de nuestra Universidad y peor aún es la respuesta mayoritaria del
estudiantado, caracterizada por la indiferencia y apatía cuando se le reclama
tomar parte, y eso sin referirnos al profesorado y los trabajadores, compañero Estudiante
la forma de legitimar la arbitrariedad es la indiferencia, por eso seamos
participativos, analicemos y propongamos las mejores maneras para que se
solucionen lo más rápido los problemas que nos aquejan, salgamos de este
círculo vicioso donde al que quiere construir una mejor educación es censurado e
ignorado.
“Por una Universidad crítica, creadora y transformadora”
0 comentarios: