Un Proyecto de Reforma que Tiene como Objetivo Central la Desigualdad

 Se presenta ante nuestros ojos, afecta nuestro presente y los objetivos futuros que tengamos; el Gobierno lo llama “Proyecto de reforma a la ley 30”, pero no es más que el declive de la calidad de la educación pública en nuestro país.

En medio de las dinámicas, los intereses en juego y  lo que las grandes elites de este país pretenden en materia educativa surge este proyecto, el cual se asegura que  el mercado determine la calidad educativa en Colombia.

Se cercioran por medio de esta reforma, que las personas con menores recursos por la necesidad de obtener el subsidio educativo, se dirijan a los establecimientos, públicos y por el contrario los que tengan mayores  ingresos, es decir mayores posibilidades de escoger opten por las entidades privadas; esto  traerá como consecuencia que las personas en busca de mayor calidad prioricen la opción educativa privada antes que la pública, el estigma será palabras más, palabras menos: “lo público es igual a baja calidad”; Siendo esto una realidad, ya que si se adopta el modelo de “Apropiación presupuestal por estudiante”, habrá un deterioro en la calidad del servicio, puesto que de esta manera se las entidades educativas se ocuparan es de la obtención de los recursos y no de la calidad en la prestación del servicio.

Entre muchas consecuencias, la grave es el incremento de las desigualdades sociales, situación que ya no es ajena a la realidad de nuestro país, en donde día a día se afianza más la tipificación de la población  en  ricos y pobres, alejando la posibilidad de la unidad y la lucha conjunta de la comunidad por la igualdad de oportunidades y la obtención de beneficios.

Publicado en edición 1 del bolsón.